
Un atardecer desde el parque central de Tixán

Esto es un rodeo, los toros no se lastiman, solo se los torea con banderas y gente dispuesta a ser corneada

Un poco después, arrepentido cojeaba a su casa.


Los toros se ofrecen de diferentes haciendas, se califica que tan bravos y activos son, para sus dueños es un orgullo que su toro sea aplaudido e invitado nuevamente el siguiente año.








Antes de la corrida las familias y asociaciones anfitrionas reparten víveres entre los asistentes.


A esa velocidad una botella de refresco puede ser suficiente para dormir un adulto.






No todos le ganan al toro, adolorido pero vivo este joven es trasladado a su casa.



